Las despedidas en Cuba se hacen cada vez más; no para viajar dentro del país, sino para salir y no regresar más al no ser por motivos de turismo. Últimamente, cuando hablo con amistades de Cuba, los temas de conversación son: "... ya fulano tiene la visa y pidió la carta de liberación...", o "... supiste que mengano se fue y se quedó...". Sólo son tema relacionados con escapar de Cuba porque no se puede más, las personas están ahogadas, obstinadas, con ganas de perderse.
Ayer me escribió un amigo de la infancia por Facebook, está viviendo en Toronto, Canadá y lo vi bien, tiene publicado un video en YouTube donde se nota feliz, contento. A pesar que estamos en diferentes continentes estoy seguro que desea lo mismo que yo, o que mi amigo Wilner que está en España, y tantos otros amigos que viven en Bélgica, Francia, Alemania: tener mañana una patria libre, donde podamos regresar a ella y poder trabajar, vivir con nuestra familia y que nuestros hijos tengan la oportunidad de crecer en una Cuba democrática, con libertad.
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